Otro trastorno muy difundido durante los meses más fríos del año es el “dolor de garganta”, que se manifiesta con sequedad, ardor e irritación en la garganta y que nos da fastidio y dolor. El frío y los ambientes cerrados aumentan la vulnerabilidad del aparato respiratorio frente a la acción de los virus y bacterias, favoreciendo su difusión a través del aire. El denominado “dolor de garganta” generalmente es el primer síntoma de muchas manifestaciones inflamatorias de las vías respiratorias altas: faringitis, amigdalitis, resfriado común, gripe, etc... Muy a menudo el término “dolor de garganta” se utiliza para definir el dolor que se manifiesta durante la deglución y al hablar; este dolor, junto a la sensación de sequedad, ardor, constricción y enrojecimiento de la garganta es consecuencia de la inflamación de la mucosa de la faringe. Esta puede deberse a múltiples factores: polvo, humo de cigarrillos, inhalación de sustancias químicas irritantes, cambios bruscos de temperatura, sequedad del aire en el hogar y en el trabajo, mala ventilación del ambiente donde se vive o incluso uso incorrecto de la voz (¡apoyar a tu equipo en una partida puede dejarte sin voz!) La inflamación difusa de la mucosa de la faringe se denomina faringitis, puede ser aguda o crónica y la mayoría de las veces es de origen viral. La faringitis aguda aparece repentinamente y generalmente evoluciona con rapidez, resolviéndose en pocos días. En las formas de origen infeccioso los síntomas nombrados anteriormente pueden ir acompañados de estornudos frecuentes, lacrimación, tos, fiebre, dolores musculares y cefalea leve. En estos casos las plantas y sustancias naturales con propiedades medicinales son de gran utilidad: Propóleo, Salvia, Mirra y Malva son las más utilizadas. El Propóleo, que ya se empleaba en la antigüedad, es sin duda la más conocida: esta sustancia cerosa y resinosa producida por las abejas posee importantes propiedades saludables que ayudan a la funcionalidad de las vías aéreas altas, especialmente en las afecciones de la cavidad oral; se puede encontrar en aerosol y en tabletas. La Mirra, con sus propiedades astringentes y analgésicas, resulta muy útil en el tratamiento de los trastornos inflamatorios de las vías aéreas altas. La Salvia desarrolla una actividad antiséptica e antiinflamatoria. Y por último la Malva, utilizada sobre todo para tisanas o infusiones, que desarrolla una acción lenitiva y calmante. Fuente: www.aboca.com
Comentarios (0)
Nuevo comentario